jueves, 8 de mayo de 2014

El chisme como actividad favorita de los gays




 Que si te acostaste con fulano, le bajaste el novio a aquél o si eres más fácil que la tabla de multiplicar del 1. ¿Quién no ha sido víctima de los chismes y rumores que TAN comunes son dentro del ambiente gay? Si algunos de ustedes no, a mí sí permítanme levantar la mano, las dos, y aún me faltarían extremidades para poder ser preciso con la cantidad de veces que me he visto metido en habladurías de las que a veces ni siquiera he sido parte.

Pero en esta ocasión lo que me pregunto es: ¿a qué se debe? Aunque es cierto que hasta entre los heterosexuales los chismes están a la orden del día, entre los gays es la comida diaria. ¿Por qué? ¿Será que está genéticamente agregado el placer del chisme en nuestro ADN? Por más que muchos puedan pensar que así es, la verdad es que no. No a todos nos encanta meternos en donde no nos llaman y estar esparciendo historias con los demás.

Sí, un gay tiene una fama muy bien cimentada de ser chismoso, falso y hasta hipócrita. Y es que aunque muchos podamos decir no somos así, la realidad es que de una forma u otra siempre terminamos metidos en problemas que ni siquiera son nuestros. O sí… depende de cómo miremos las circunstancias.

El chisme es algo natural. Hablar de que tal tipo anda ahora con equis goey o de que aquél le fue infiel a ese otro son temas de conversación que todos hemos tenido o hemos escuchado en algún momento, y no digo que esté mal, lo que está mal es cuando un simple rumor empieza a cobrar importancia al grado de afectar la vida de otra persona.

Ok, supongamos que tu mejor amigo te contó que ese conocido en común se acostó con el novio de aquél otro y después viene alguien a preguntarte qué piensas de él porque le gusta. Muchos podríamos quedarnos callados y dejar que lo conozca por sí mismo, que averigüe si en verdad las da a la primera o no, pero esa picazón en la garganta empezará a molestarnos y tarde o temprano terminaremos diciéndole lo que escuchamos. ¿Y te has puesto a pensar lo que un chisme sin bases puede hacerle a otra persona?

Si es cierto o no, al menos tú ya sembraste una duda en la mente del otro y créeme que no va a ser muy fácil de sacar. Somos tan pendejos que algunas veces a la primera creemos lo que nos dicen de alguien, juzgamos sin saber y nos hacemos nuestras propias ideas sin antes dar la oportunidad de causarnos una imagen por ellos mismos. Damos por hecho que lo que nos dijeron es cierto y ponemos etiquetas tan fácilmente que en algunas ocasiones son erróneas.

¿Cuántas personas no han empezado un rumor únicamente por el hecho de chingar al otro? ¿Cuántos no han sido víctimas de ellos a veces sin deberla ni temerla? No es nada agradable ser el objeto del odio o envidia de nadie, pero creo personalmente que es mucho menos agradable ser aquél que se encarga de difundir información que en ocasiones ni siquiera es verdadera. ¿A ti qué te importa si alguien se acostó con dos o con cuarenta, si le puso el cuerno a su novio o si es alcohólico o drogadicto? ¿Quién eres tú para juzgar y vender a una persona como la peor, qué te da el derecho?

Personalmente, creo que no hay cosa que no se haya dicho ya de mí. Que si bajé novios, que si me he acostado con la mitad de la población mundial, que si juego con las personas, embarazo a otras (sí, hasta eso), que soy egoísta, egocéntrico y superficial, que si miento, que si soy falso, que si tengo pedos mentales, que no me importa pasar sobre quien sea para lograr mis objetivos… Reconozco que antes me afectaba cañón todo lo que escuchaba que yo supuestamente había hecho, y me afectaba mucho más que las personas que lo escuchaban creyeran que era verdad. Y sí, muchas veces los chismes eran ciertos, sí me acosté con tal o cual, sí he mentido, sí me he preocupado más por mí mismo sin importarme si paso sobre alguien más para conseguir lo que quiero, pero… ¿Eso significa que con todas las personas mi actitud será igual?

No, no hay qué confundir las cosas. Todos cometemos errores, todos hemos hecho algo de lo que no estemos muy orgullosos, pero eso no quiere decir que las mismas actitudes se repetirán todo el tiempo. Disculpa, pero que fulano de tal se haya acostado con el novio de tu amigo no quiere decir que lo hará con el novio de todos. Siendo claros, créeme que no TODOS los novios le parecen atractivos. Si le mintió a su pareja, no quiere decir que le va a mentir a la siguiente, ¿tú qué sabes de sus motivos? Honestamente creo que muchos están TAN metidos en el espiral del arcoiris que se dejan llevar por cualquier cosa que les dicen. A ver… ¿Y si el tipo que tanto te gusta y por el que mueres tiene fama de zorro? ¿Vas a dejar que lo que crees se interponga con tus deseos de conocerlo?

La clave en la cuestión del chisme está en ponerse en el lugar del otro y pensar… ¿Cómo me afectaría a mí si alguien tan fácilmente dijera algo que me jode? No es difícil, créeme, por más que te mueras por ir y contar aquello de lo que te acabas de enterar, la prudencia y el respeto son la respuesta a esa emoción por hacer algo público, cuando a veces ni te consta.


Yo no sé por qué se quejan de la fama que tiene un gay. Que se les tache de promiscuos, de falsos, de hipócritas y de perras, porque la cruda realidad es que si eso se piensa de los homosexuales es porque se ha ganado a pulso, porque nos ha valido madre seguir alimentando los rumores, inventando algunos chismes y esparciéndolos cuando ni siquiera sabemos si son ciertos. Quizá no te importe quemar a alguien con los demás, pero créeme que te va a importar cuando las habladurías se traten de tu persona. Y es que no importa si eres popular, guapo, feo o de bajo perfil, cualquier gay siempre va a ser el objetivo del chisme de otro, por más triste que se escuche. 

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