A todo gay le encanta
comerse un buen trozo de carne. Eso es un hecho, sino resultaría extraño, ¿no?
Y es que si algo es cierto es que los homosexuales tenemos una fijación (o
adoración) por el pene, que muchas veces va más allá de lo normal. En cambio,
para las mujeres a pesar de ser importante, no representa de tal relevancia
como lo es para nosotros. Analicemos el porqué.
A pesar de que se ya se
haya hablado TANTO de eso, lo cierto es que cuando se trata de sexo no hay tema
que se agote. Pensé que resultaría
aburrido y repetitivo hacer una columna cuestionando la importancia del tamaño
del pene a la hora de echar pasión y enfocarla hacia esos que no nos gustan, pero
resultó todo lo contrario, y es que al preguntar a hombres y mujeres sus
opiniones, las respuestas fueron de lo más sorprendentes y hasta cómicas.
¿Por qué hombres y mujeres
si este es un espacio dirigido al público gay? Fácil, porque la mentalidad y
las expectativas de ambos son simplemente dignas de compararse.
Empecemos pues. ¿El tamaño
importa? Sí, por más que digan que no es importante la verdad es que lo es. Curiosamente
la mayoría de las mujeres dijo que lo importante era que supieran usar su
herramienta sin importar si era chica o grande. En cambio, todos los hombres
(gay, por supuesto) no dudaron en dejar de lado la técnica para darle
importancia a la longitud. ¿Por qué para todo hombre es mejor un pene de buen
tamaño a la hora del sexo? OJO, que no dije “un pene grande”. La respuesta está
en que los gays somos más visuales, preferimos ver algo que nos motive, que nos
prenda, que nos incite a jugar con él, a darle besitos y apretones. Y hablando
por los pasivos, un pene chico no les hace ni cosquillas. ¡Qué importa si tiene
o no cuerpazo! Lo importante es que la tenga bien, porque es preferible uno
flaco con buen paquete que uno mamado de corto alcance.
¿Y de qué medidas hablamos
cuando decimos “de buen tamaño”? Aunque científicamente el tamaño promedio del
pene en estado de erección es de 14.5 cm (sí, leíste bien) para TODOS, tanto
hombres como mujeres esa medida no es suficiente. En general, la mayoría llama
“normal” a un pene de 16 a 17 cm, tomando cualquier cosa bajo esa medida como
pito chico y todo por encima de ella como de buen ver. Aunque debo decir que
algunas respuestas me sorprendieron, pues no faltó quien dijo que lo regular
era de 18 a 20 cm. ¡Toma! Esos sí que no son de boca chiquita, literal.
Una de las dudas que tenía
curiosidad por resolver, era la reacción de un activo ante el tema. Se dice que
al no ser penetrado, el activo tiene más predilección por las nalgas que por el
pene de su pareja sexual, y comprobé que eso es sólo un mito. Los activos
también las prefieren grandes. Y algo que me sorprendió fue saber que tanto
pasivos como activos nos hemos vestido y retirado de la escena cuando a la hora
de la hora nos topamos con una miniatura colgando entre las piernas del otro.
Claro que no falta quien pueda compadecerse y seguir, tratando de hacer sentir
cómodo al chavo, pero la realidad es que es una minoría la que lo hace. El
rechazo que tenemos hacia alguien con pene pequeño va más allá de la cara o del
cuerpo, quizá hasta más allá de la satisfacción sexual.
¿Por qué? Es bien sabido
que desde siempre el tamaño del miembro es sinónimo de hombría, no por nada
aquellos bien dotados lo van presumiendo por la vida, a veces hasta sin que se
les pregunte al respecto. Y si tú eres uno de ellos, déjame decirte que por más
difícil que parezca, a la hora del sexo tanto mujeres como hombres demostraron
cierta negatividad ante un pene de más de 20 cm. Que si lastima, que si no es
ideal para hacer sexo oral, o que si el que lo tiene cree que sólo por eso ya
no debe esforzarse en la cama. Los
motivos varían, y aunque se admite que una buena herramienta es atractiva
visualmente, cuando hablamos de penetración ya no resulta tan deseada. Eso sí,
la reacción ante una de tamaño pequeño es diferente. Esas causan flojera y baja
de excitación, pero jamás dolor.
¿De dónde viene eso de que
entre más grande es mejor? Sin duda la industria del porno ha ayudado demasiado
a acrecentar ese rumor, pues en las películas o videos vemos tipos a veces con
monstruosidades colgando y hemos llegado a aceptar ese tipo de tamaños como
“normales”, sin tomar en cuenta que detrás de cada escena hay muchos factores
que ayudan al talentosísimo actor. Ya sean los ángulos de las tomas, rebajar el
vello a casi nulo, el uso de aparatos que alargan y ensanchan el pene
temporalmente o que se contrate a tipos de estatura baja con miembros un poco
más grandes de lo que sería proporcional a su cuerpo.
¿O qué pensabas que todo
eso era natural? Pues no, temo reventar tu burbuja pero la realidad es que el
80% de los tamaños que vemos en pantalla son producto de ese tipo de
“ayuditas”.
Total, ni chico ni enorme
sino tamaño promedio. Pero ¿y qué hay del grosor? Aquí es por demás sabido que
una demasiado gorda le atrae a muy pocos y una delgada como fideo, a nadie. Y
es que cuando te topas con una demasiado gruesa la penetración es por de más
dolorosa e incómoda, a menos que ya tengas aquello más abierto que el techo de
un estadio. Y a pesar de que tanto para una grande como para una gruesa existen
productos que ayudan con la dilatación, una de las respuestas más comunes que
recibí fue que las relaciones sexuales no serían tan usuales como podrían ser
con alguien de tamaño y ancho promedio, pues con el uso excesivo de (por
ejemplo) los famosos poppers, termina doliéndote la cabeza además del culo.
Nota: El ancho promedio de
un pene en estado de erección va de 8.8 a 10 cms.
Y ya pasando a detalles que
no tienen nada qué ver con lo gordo ni lo alto, ¿qué hay de las formas?
¡Agárrense! Que aquí sí hay de todo como en el Oxxo. Según lo dicho, aquellos
penes con formas irregulares resultan un tanto repulsivos y hasta bajan la
excitación en menos de lo que Enrique Peña Nieto vuelve a decir una pendejada.
Aunque se piensa que hay
penes con forma de gancho que pueden resultar estimulantes a la hora del sexo,
una mayoría opina que una desviación excesiva en el pene no es agradable. Lo
mismo con las formas extrañas, tales como aquellas en forma de paleta (muy
delgadas y cabezonas), las de forma de cono (punta chica tronco amplio), el de
forma de lápiz (delgado y con punta picuda), entre otros. Lo cierto es que de
la vista nace el amor, así que a uno bonito no hay quien le diga que no.
¡Los olores! Aquí no hay de
otra, un pene atractivo es aquél que es aseado, que huele bien. Tampoco
queremos que se lo perfumen, pero una buena higiene es BÁSICA no sólo a la hora
de tener sexo, sino todos los días a todas horas. Qué molesto y cero excitante
es toparse con uno con mal olor, y eso no se pone a discusión, creo que TODOS
coincidimos en ello. Y dentro de la higiene y el buen olor aplica también
aquello del sabor. Dicen que dependiendo de la alimentación es el sabor que
tendrá el semen, pero aquí no hablamos de eso, sino del pene. Y un pene mal
lavado, con residuos de orina, semen o evidenciando que el tipo no se ha bañado
en un par de días, es por de más desagradable. ASÍ NO.
En donde hay variación de
nuevo es en el gusto por el arbusto. Aunque hoy en día casi todos recurrimos a
la depilación del vello o a rebajarlo, existen personas a las que les prende
una mata abundante, un afro bien hecho. Y de la misma manera habemos aquellos a
los que nos gusta mucho más corto como esos que prefieren que el vello sea
inexistente. ¿De verdad? Chale, a mí se me hace como estar echándote a un
infante, y la pedofilia no está cool.
Pues qué les digo, hablando
de penes siempre hay variedad de gustos y opiniones, pero como ayer mientras yo
preguntaba preferencias me devolvían la pregunta esperando saber las mías, pues
aquí les van. Me he encontrado de todo, monstruos que creía extintos, enanos
mitológicos y bichos raros, y aunque a cada uno le saqué provecho, en lo
personal creo que mi opinión va de la mano con la de ustedes. El tamaño sí
importa, una verga pequeña te baja el pedo y ni a jugar te invita, en cambio
para el faje una más grande que el promedio resulta coqueta pues puedes hacer
más cosas con ella. Eso sí, mi predilección está con el promedio, que en mi
humilde opinión dejo en 17 cm.
Sorry por las ganchudas y
chuecas, cero atractivas. Y una de las cosas que noté es que me pasó algo que
únicamente las mujeres comentaron, una vez que se involucran sentimientos, el
tamaño y la forma del pene de tu pareja pasa a segundo plano, y ya viéndolo con
ojos de amor hasta le quieres sacar fotos para Instagram. Ahí se demuestra una
vez más que las mujeres son mucho más sentimentales que sexuales, y que uno
como hombre puede llegar a ser más físico que comprensivo. Pero me pasó a mí…
¿será que ya me va a llegar mi periodo?
Aunque seguramente seguirá
el mito de que entre más grande es mejor y que aquellos de buen paquete son los
predilectos de la humanidad, la verdad creo que es cuestión de perspectivas y
proporciones. No está padre que un tipo de 1.90 ande cargando una de 15 cm, así
como tampoco que uno de 1.60 vaya por la vida con 23 en la entrepierna. En la
proporción se encuentra la satisfacción.
Y cerrando con el tema de
la autoestima, ¿qué pedo con aquellos que se sienten mejores por tenerla más
grande? Peor aún, ¿qué onda con los que se reprimen (y deprimen) porque la suya
es pequeña? La seguridad es fundamental en un hombre y esa no te la da el
tamaño. Chica o grande, la apreciación que uno tiene con su cuerpo va más allá
del tamaño de nuestros genitales, refleja qué tanto nos aceptamos y cuánto amor
tenemos por nosotros mismos. Porque aunque nos gane el morbo al escuchar que
tal o cual la tiene grande, lo padre es que sin importar si a la mayoría le
gusta o no, tú te sientas contento con lo que tienes. Así sea del tamaño de un
pitufo, total, el universo pudo no haber dotado a todos con un buen pene, pero
de seguro les dio otros talentos. Espero…
Siento que el tamaño del pene es como el tamaño de los senos, haau de todos tamaños y formas muy pequeños no están padres pero traen peores complicaciones los muy grandes, solo que las mujeres viven exponiendo sus boobs ante la sociedad y no hay tanto morbo al respecto, en la práctica todo lo normal funciona
ResponderBorrarMuy interesante y si hay muchas.cosas de ciertas pero la seguridad de uno es lo que hhace el sexo fabuloso Saludos
ResponderBorrarte falta con todo respeto mecionar algo mas importante, puede que si el tamaño entre mas de 15cm sea bueno, per osi no lo saben mover o son un poco precozes ahi llega una desilucion mas grande que la de un pito chico, y puede ser al contrario uno menor de 15cm y tengo buen aguante eso enamora o mejor aun deja buen sabor de boca, en mi opinion y experiencia el tamaño si importa, pero si no se saben mover y son precozes ahi termina la magia.
ResponderBorrar